Podriamos pensar en el Cerebro humano como el soporte físico a nuestra inteligencia así mismo y según creo entender el Firmware de una electrónica es la “inteligencia del silicio”. En mis tiempos, muchos chips (incluso algunas CPU’s) implementaban su funcionalidad configurando diversas y complejas conexiones entre cientos o incluso miles de transistores. Cada patilla, cada asignación tenía su propio y único cometido… pero los tiempos vuelan y aunque también hace mucho tiempo los ingenieros electrónicos entendieron que la versatilidad de sus desarrollos pasaba por dotarlos de un mínimo de flexibilidad para que dichos diseños tuvieran mayor usabilidad pudiéndose adaptar a diferentes escenarios, se trataba de separar la electrónica y su funcionalidad o sea el famoso “Hardware” y “Software”, todo ello vino a convertirse lo que se conoce como firmware. Inicialmente acostumbraba a ser una serie de Micro interruptores que hacían posible esa customización, posteriormente y con la generalización de los procesadores una ROM y con los tiempos las EPROM’s las E2PROM y un etc. hasta llegar a las FLASH. Hoy en día estamos rodeados de ‘firmware’ por todas partes incluso el pequeño ‘ratón’ que utilizas en tu PC tiene implementado su propio ‘firmware’.
Llegados a este punto os estaréis preguntando a que viene la explicación y donde quiero llegar. Pues bien os relatare en tono de humor mi última experiencia con la supuesta inteligencia del silicio.
Como tecnólogo, me vi en la obligación escoger un dispositivo portátil dotado de un procesador VIA una pantalla de 8.9” que ahora están de súper moda. La diferencia entre los dos candidatos era que uno tenía soporte para WSVGA y el otro para WXGA, resumiendo uno alcanzaba una resolución de 1024 * 600 y el otro 1280 * 768 ¡Brutal! Para visualizar todo un escritorio del Vista en tan solo 8.9”, aunque sin dudarlo dispuesto en asumir el tormento de forzar la vista o incluso ponerme gafas.
La otra historia viene cuando aprovechando una salida para un segundo monitor alguien piensa que sería fantástico poder utilizar uno de esos de 20” para cuando llegamos de nuestras incursiones fuera de la oficina poder disfrutar del gran tamaño y de la gran resolución que nos proporciona WXGA.
Siendo fiel a la idea, adquirimos un monitor 16:9 de 20” que nos permitiera sacar esos 1280 * 768 y la gran sorpresa con mucha angustia fue ver como las ilusiones se iban hacia arriba y hacia abajo al ritmo de un desesperante tembleque de la gran pantalla. La primera conclusión fue pensar que el pequeño portátil no estaba dando la frecuencia requerida por el flamante monitor y al desespero de no poder hacerlo trabajar correctamente con resoluciones superiores a 1024 * 768 fue pensar que los temblores de la imagen tuvieran su origen en un defecto de fabricación.
PUES NO!!
El inteligente firmware del silicio de la pantalla, entre las más de cien y una opciones parametrizables y ajustables a ciento y un escenarios, disponía en su menú 15 de una opción que algún avispado ingeniero había decido deshabilitar, pensando en que la mayoría de los mortales usuarios de su producto utilizaría por defecto el gran monitor de 1280 * 768 a resoluciones inferiores a 1024 * 600 … quien va a comprar un monitor y va a usar la máxima resolución? Está claro que nadie!
Bien pues, en algún abandonado rincón del menú dentro de retorcidos literales complicados de interpretar y después de 4 horas dándole vueltas apareció majestuosa la opción :
MODO WXGA : off … el firmware de mi Cerebro automáticamente resolvió a … ¡Esto debería ser ‘on’! y efectivamente después de cambiar esa configuración y para regocijo de todos el monitor empezó a mostrar firme, sin titubeos ni tembleques una a una la resolución de 1280 * 768 líneas!!!, aunque estoy convencido y a favor del ingeniero que tomo la decisión de incluir la configuración de MODO fue intentando resolver una casuística concreta, debo matizar que no las contemplo todas, pues el MANUAL de usuario donde se describen resoluciones y frecuencias, debería haber incluido una columna anunciando el MODO.
Sabéis que acostumbro a escribiros cortos con la intención de poner un tono de humor a nuestro día a día, aunque en ocasiones como esta creo que lo importante no es el hecho aislado y la ironía, si no la reflexión final a todo esto.
No me preocupan las cuatro horas en sí, ni tan siquiera la dudosa puesta en escena de los valores de fábrica que maneja el ‘firmware’. Me preocupan los cientos de personas que desconociendo las terminologías (tales como WSVGA, WXGA) que no saben distinguir entre pulgadas o resoluciones, de altas definiciones, caen a manos de productos que por prestaciones tienen un coste superior y finalmente por ese desconocimiento dejan de darles su mejor uso o prestaciones. En el caso de esta historia no tiene importancia pues después de dedicarle el tiempo necesario conseguimos el objetivo… pero me pregunto cuantas personas y en cuantas situaciones similares terminan mal, aborreciendo, dando mal uso y lo peor frustrando ilusiones.
Como desarrolladores no solo tenemos la responsabilidad de saber aportar técnicamente soluciones sino que además deben ser soluciones que sepan conectar o acoplar esa tecnología con la gente en general, que al fin y al cabo son los destinarios de todo esto. De nada sirve proyectar y conseguir grandes logros a nivel tecnológico si no somos capaces de hacerlos llegar de una forma asequible y agradable a personas no expertas, que para expertos representa que ya estamos nosotros.
… y ahora vuestros comentarios J
Una anécdota que por desgracia se produce a menudo. La mayoría de usuarios no aprovechan ni la mitad de las funcionalidades de los dispositivos que usan (pda, móvil, pc…), por el desconocimiento de éstas debido a una pésima documentación. O lo que es peor, la mayoría de gente no suele ni mirar el manual. Y si a eso le sumas una mala configuración del firmware…
Saludos!